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TRAS CARTÓN   La Paternal, Villa Mitre y aledaños
 29 de marzo de  2024

31 de agosto de 2012

NUEVO PARO DOCENTE EN LA CIUDAD

Una parodia conflictiva


Se realizará hoy en las escuelas de la ciudad un paro de veinticuatro horas convocado por la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) y la asociación docente Ademys contra la Resolución 2.711 del Ministerio correspondiente, en virtud de la cual fueron separados de sus cargos seis docentes de la Escuela Nº 3, del Distrito Escolar 18°, del barrio de Monte Castro.


El miércoles 28 de agosto último, el Ministerio de Educación del Gobierno de la Ciudad comunicó que apartó a los docentes “que el 20 de marzo de 2012 realizaron una parodia contra el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, y el ministro de Educación, Esteban Bullrich, por la integración de cursos en la ciudad ante niños de 6° grado de la escuela primaria”.

En un video de esa parodia que, filmado por el padre de un alumno, fue ampliamente difundido, puede verse cómo, ante una audiencia en la que se advierte la presencia de alumnos y con la participación de algunos de ellos en el escenario, dos adultos actúan un diálogo de netos rasgos panfletarios en el que uno hace del jefe de Gobierno, Mauricio Macri, y el otro de su ministro de Educación, Esteban Bullrich.

En esa especie de entremés, que se representó en horario de clases, se caricaturiza con gruesos trazos la decisión ministerial que para los gremios fue cierre de cursos, y para el Gobierno, fusión.

En declaraciones radiales, Bullrich señaló: “La parodia se hace con alumnos de siete años actuando; en el video se ve cómo los empujan, y frente a chicos de esa edad y a padres que fueron convocados sin decirles lo que era. Uno de los padres se molestó cuando lo vio, lo filmó, hizo la denuncia y presentó el video”.

Fue así como, según hizo saber el Ministerio, “la Dirección General de Coordinación Legal e Institucional inició una actuación sumarial para investigar los alcances de la parodia y luego de la intervención de la Procuración General del Gobierno de la Ciudad, se resolvió apartar del cargo a la directora, a la vicedirectora, a la secretaria, dos docentes y un bibliotecario por ‘haber vulnerado varias de las obligaciones contempladas en el artículo 6 del Estatuto Docente’”.

La resolución dispone la "reubicación transitoria de sus cargos sin que su tarea pueda ser desarrollada frente a alumnos, en atención a la gravedad de los hechos ventilados, y con el objeto de no entorpecer el normal desarrollo de la investigación sumarial a practicarse".

En declaraciones a distintos medios, Bullrich aclaró que los afectados por la medida fueron separados de sus cargos en forma preventiva hasta tanto se conozca el resultado del sumario, y mantienen las responsabilidades que tienen en otras escuelas, así como el goce de haberes.

 

Los gremios

Ante las sanciones el gremio UTE, alineado con la CTA oficialista que conduce Hugo Yasky, convocó para hoy a un paro con movilización a la Jefatura de Gobierno. Por su parte Ademys, a pesar de que en su momento había repudiado el hecho en cuestión, adoptó la misma decisión.

En la conferencia de prensa conjunta durante la que se anunció la medida de fuerza, el titular de UTE, Eduardo López, anunció que el paro se hará “para exigirle al jefe de Gobierno la pluralidad de voces, que no estigmatice a la escuela pública, que no la castigue y que mucho menos separe del cargo a docentes por pensar distinto”.

Estimó que “es un paro a favor de la democracia, la pluralidad y la diversidad en las escuelas públicas de la ciudad de Buenos Aires, que es un piso de consenso que debemos mantener pese a las políticas del jefe de Gobierno”.

A su turno Manuel Gutiérrez, secretario de Prensa de Ademys, manifestó que “la medida de fuerza es para plantear que cese la persecución a los docentes, y eso se debe expresar con que estos docentes sean reintegrados inmediatamente a sus cargos”.

Y añadió: “Esto es muy grave porque es la antesala al despido y es equiparable a lo que se hace en el caso de una denuncia de acoso sexual a un alumno o malversación de fondos. Esto es una situación límite, no la podíamos dejar pasar y por eso convocamos al paro”.

En la oportunidad se informó que “la sanción alcanza a la directora de la escuela, Viviana Beatriz García; la vice, Rosa Irene Maqueira; la secretaria Sonia Mirta Muguerli; los maestros de grado María Celeste Salgán Ruiz, Guillermo Di Fini, Carolina Hernández y el auxiliar de portería Néstor Dávila (quien recibió una suspensión preventiva)”.

Ambos gremios participaron anteayer de un abrazo simbólico a la escuela.

 

Opiniones

Este estado de cosas mereció distintos comentarios por parte de funcionarios y legisladores.

Así, la vicejefa de Gobierno, María Eugenia Vidal, en declaraciones a un medio televisivo, expresó: “Nos parece un paro arbitrario, dejar sin clase a más de trescientos mil chicos en respuesta a una separación preventiva con goce de sueldo mientras se sustancia la investigación de lo que sucedió en una escuela. Nos parece desproporcionada la medida”.
En cuanto al acto que provocó la sanción, consideró “un hecho grave que un grupo de docentes haga un adoctrinamiento político frente a chicos de sexto grado y sus padres, en un acto escolar”.

Por su parte el vicepresidente de la Legislatura, Cristian Ritondo (Pro), precisó que los docentes sancionados “no se quedan sin trabajo, están reubicados mientras se sustancia el sumario administrativo y hoy están realizando actividades administrativas”.
Y agregó: ''Si hubieran hecho una parodia de Cristina y uno de sus ministros para sacarle policías a la ciudad de Buenos Aires o para no darle coparticipación, no darle dinero para la construcción de escuelas, hubiéramos hecho lo mismo, separar del cargo y sumario administrativo. A nadie se echó”.

A su vez la diputada de la Ciudad Laura García Tuñón (Buenos Aires para Todos), integrante de la Comisión de Educación de la Legislatura, opinó que “esto es una muestra más de la embestida contra la escuela pública y de las persecuciones políticas y nefastos intentos de disciplinamiento por parte del Pro a aquellos que expresan ideas diferentes o manifiestan alguna crítica a sus políticas educativas”.
En ese sentido, su colega Alejandro Bodart (MST en Proyecto Sur) presentó ayer dos proyectos en la Legislatura: uno de declaración para que ese cuerpo colegiado rechace la Resolución 2.711/12 y se reincorpore a los docentes a sus cargos, y otro de resolución para que se cite en forma urgente al ministro Bullrich a dar explicaciones en el recinto de sesiones.

“Se puede discutir si se les fue la mano a los docentes, pero es brutal la respuesta del Gobierno” dijo a Perfil el legislador.

 

¿Y los chicos?

Puede apreciarse que en esta polémica no fueron muchos los que se ocuparon de los derechos de los alumnos. En este contexto adquieren particular relevancia los conceptos de dos periodistas que en sendas columnas de opinión pusieron en los más chicos el eje del debate.

“¿Cómo se enseña a respetar a los demás si un docente parodia a una autoridad, cualquiera sea, frente a sus alumnos? ¿Cómo evita que después de un espectáculo semejante no sea el alumno el que parodie al maestro y él tenga que aceptarlo con agrado?”, se preguntó María Elena Polack en La Nación.

Y prosiguió: “Mientras los especialistas en educación gastan discursos sobre la necesidad de elevar la calidad educativa, las disputas políticas entre sindicalistas proclives al gobierno nacional y la administración de Mauricio Macri complican al sujeto central de la historia: los más chicos, que buscan en sus mayores los ejemplos por seguir”.

Por su parte Alfredo Leuco, en su habitual columna en el programa que conduce Fernando Bravo por radio Continental, afirmó que “los alumnos son el objetivo y el motor de la política educativa” y consideró que “los maestros no pueden realizar con chicos de colegio primario un acto político partidario de ningún tipo”.

Aclaró que los docentes “están en todo su derecho de opinar lo que quieran” y “de salir a la calle y manifestarse en actos como lo hacen siempre y decir, si quieren, que Macri está a la derecha del hombre de las nieves”.

Pero remarcó: “Lo que no tienen derecho es a hacerlo en horario de clases delante de pibitos de guardapolvo blanco que son demasiado chicos para ser manipulados políticamente”.  

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